miércoles, julio 26, 2006

Si pudiera parar este mundo

Una gota cayendo
Sola
Precipitándose por esta oscuridad de vela
Que me consume

________Si pudiera hacer que este mundo
________Parara un segundo

Una gota cayendo
Borrosa
Entre Botellas vacías
y Manos que tiemblan

________Si pudiera hacer que…
________Parara...

Una gota cayendo
Quizá una lágrima
Derramada por tanto esfuerzo
Palabras no dichas
Besos que se pierden

________Si pudiera…
________Parar…


Una gota cayendo
Vencida
Un parpadeo que Humea
y se extingue
Solo
en la oscuridad más negra.

N el culo de Cervantes

N esta noche d viento y bufandas
parece que hace frío,
pero yo estoy calentito
aquí sentado,
n el culo d Cervantes.

Aferrado a mi lápiz
m sumerjo n una paz literaria
indiferente ante los besos,
abrazos
y miradas ajenas...

Sin embargo,
cómo evitar esa punzada
esa rotura vertebral
ante el paso de unos ojos tan negros.
Cómo permanecer ajeno
a esa ventolera d tacones n el callejón,
ojera d noches enteras
abrazado a la almohada.

Es cuando siento los brazos helados,
los labios morados;
cuando, a tientas, busco el abrigo.

Es cuando comienza ese rumor
-casi una certeza-
d unos ojos aún más negros,
d un corazón cálido
y d una Sonrisa con la que bailar salsa
bajo las sábanas dl alma.

Ruido de grillos
q romperán mi lápiz,
me apartarán de la pestilencia de Cervantes
y me acompañarán a todos los bares.
Hasta que de nuevo,
un amanecer m ncuentre
Tiritando,
Solo,
pero cn el pecho lleno de Sonrisas.

martes, julio 25, 2006

Mañana te cuento qué tal fue

Caída libre
horizonte abajo

Mi piel tiembla como llama extinguiéndose
mi pelo se vuelve cano
mi cabeza se apaga…

No tengo miedo:
no tuve elección:
debía saltar

Caída libre por mi vida
huesos rotos
sueños olvidados…
No hay paracaídas
Ni ganas de aprender a volar

¿más abajo?
El horizonte
¿y después?
Y eso a quién le importa.

Centro América (Usulután)

Un tronco de palmera
arrulla en una hamaca
a una joven Señora.

En el sueño dibuja
la sonrisa de sus quince años
y los morenos ojos
del padre de su niña.

La suavidad del primer baile
y un cálido aire
entre su piel y su juventud,
le enrojeció las mejillas
y la despertó.

Al borde del arroyo
chapoteaba su niña,
y bajo la colina
el eco de las luces del pueblo.

Vistió a su hija de domingo
y encontró, junto a la camisa
y el sombrero del esposo huido,
su falda blanca.

Tiró los restos ya olvidados
y partieron, riendo y abrazadas,
a la fiesta del pueblo.

Ocultos a la Luz de la Cantina

…protegidos por una esquina,
ocultos a la luz de la cantina,
vislumbras la cara de Ella,
el resplandor en sus mejillas,
la sonrisa emocionada
y en los ojos
un suspiro
que sin palabras dice:
todo el planeta
puede esperar eterno
ahí afuera…

“No se duerma, mi chavo,
¿Otra cerveza?”
- La voz del cantinero
Que me despierta –
“Ay, buey, creo que sí me dormí.
Órale, vamos por la sexta”.
Y tratando de recordar
Qué fue lo que soñé
Extravío mi botella
En una esquina
Exageradamente iluminada
Donde el mariachi canta
Como si fuera un rezo
¿Qué será sentir Esa mirada
Con tanto amor adentro?

Taxco

Pancartas amarillas
en la plaza del pueblo
¡Vote por Vélez,
para consolidar el cambio!

Taxis blancos maniobran
entre vendedores de pompas de jabón.
Retumban las campanas
en las escaleras de la catedral,
donde una joven de lentes negros
observa cómo se aleja su novio…

¡No se deje engañar
por las mentiras d otros candidatos!
Varios niños juegan a explotar
los globos amarillos de Vélez,
La joven de lentes negros
seca sus lágrimas
y, tropezando,
se aleja calle abajo…

¡Ya no tardará n hablar
el candidato Vélez!
Algarabía de globos amarillos
a la sombra de la catedral
donde dos desconocidos charlan

Vengo de visita
Me recomendaron distraerme
Y olvidar los problemas,
Por una chica…

Hace no tanto
Yo estaba igual
Tardas tiempo
Pero acabas olvidando…

¡Sin más demora
demos paso al candidato Vélez!
Estampida d globos amarillos
perseguidos por los niños.
Un grupo de jovencitas
de mejillas encendidas
caminan sabiéndose observadas.

Pitidos en la plaza
¡No se oye! ¡Arreglen el sonido!
Varios chicos se acercan, tropezando,
a las jovencitas,
que sonríen indecisas.
Dos ya se rozan la mano
casi sin tocarse.

Los silbidos resuenan
¡Ofrecemos una disculpa
por problemas técnicos
suspendemos el acto!

Restos d globos amarillos
cubren la plaza
pisoteados por los niños,
que ahora se alejan ligeros
calle arriba
brincando tras las pompas de jabón.

miércoles, julio 12, 2006

El Viajero

La noche avanza
sobre la línea blanca de la carretera.
Con los dedos en la ventana
juego a seguir la luz de los faros,
igual que cuando era niño
y viajaba en el asiento de atrás.

Recuerdos
de aquella ventana y otras noches
en un rincón del cuarto
asomado a mi lámpara globo terráqueo.
Rusia era tan grande como mi mano,
España era mi dedo gordo,
Madrid tan pequeño como una uña
y yo era diminuto
insignificante
invisible mota de polvo.

Demasiado pequeño
Demasiado lejos
¿Cómo haría para visitar esos países?
Los sentía lejanos como una estrella.

Sólo los alcanzaba en sueños.
A la luz de la misma lámpara
leía libros de viajeros
de aventureros.
Con el dedo seguía las frases
juntando caminos
hacia islas desiertas,
hacia pirámides en la selva,
hacia un tesoro…
Y soñaba
soñaba
toda la noche.

Pienso en esto
-han pasado algunos años,
las estrellas siguen lejanas-
en el asiento primero dl autobús
jugando con los dedos
a seguir la luz de los faros,
y se me eriza la piel.

Me vuelvo a situar en el mapa
en mitad de México,
y recuerdo los mares,
los glaciares,
las pirámides en la selva,
los tesoros ya vistos…

Y me pellizo el brazo
deseando
que no sea un sueño.